Modelo de trabajo híbrido: claves para triunfar

No es nada nuevo. El modelo de trabajo híbrido se está aplicando desde que comenzaron a suavizarse las restricciones por la pandemia. Hoy es el que tienen buena parte de las empresas en las que sí es posible teletrabajar. Los expertos ya nos lo dijeron hace más de un año: los modelos de trabajo improvisados deben madurar para que la experiencia de trabajo sea mucho más eficiente, funcional y humana.

Así de primeras se plantean un par de retos importantes. El primero es el tecnológico. Las empresas que participen de un modelo híbrido de trabajo están obligadas a contar con todas aquellas tecnologías y recursos que permitan a los empleados desempeñar sus labores con la máxima eficiencia. Pero esto no es todo. El segundo reto es humano. ¿Cómo se consigue aunar productividad con engagement, salud física y emocional y, por supuesto, liderazgo? 

¿Qué características debería tener un modelo de trabajo híbrido exitoso?

Un modelo de trabajo híbrido debe estar bien sustentado y pensado como tal, teniendo en cuenta las particularidades de los modelos que confluyen: el del teletrabajo y el del trabajo presencial. Pero, ¿qué características debería tener? Veamos cuáles son, para nosotros, las 5 claves del éxito.

1. Un modelo de trabajo híbrido bien definido

No hay un modelo de trabajo híbrido exitoso que no tenga bien definidas sus bases. Como decíamos al principio, el modelo que improvisamos al principio de la pandemia ya no puede ser válido. Esa primera implantación tiene que madurarse y, por tanto, los equipos de Recursos Humanos tienen que sentarse a desarrollar el proyecto que establezca sus bases. ¿Qué posiciones pueden teletrabajar? ¿Cuántos días por semana? ¿Cuáles serán las condiciones y/o normas? ¿Y los flujos?

2. Puentes de comunicación fluidos

El modelo de trabajo híbrido que implantemos en nuestra organización debe reforzar más que nunca los puentes de comunicación. De este modo, aunque parte del equipo esté teletrabajando y la otra parte se encuentre en la oficina, la comunicación será fluida y nos permitirá a todos progresar sin obstáculos. Durante los meses más duros de la pandemia fue la comunicación la que nos ayudó a tender puentes en lugar de dinamitarlos. ¡Sigamos!

3. Herramientas digitales idóneas

Estos meses de pandemia han supuesto un fuerte impulso para la digitalización. Sin embargo, todavía nos queda mucho camino por recorrer. La integración de herramientas digitales nos ha permitido fichar desde cualquier lugar, llevar el control horario de una manera más ágil y, por supuesto, llevar a cabo tareas de manera compartida, gestionar y resolver problemas en cualquier momento y desde cualquier punto. Seguir analizando y pensar en soluciones digitales útiles nos ayudará a seguir reforzando nuestro modelo híbrido de trabajo.

4. Estructuras sólidas para la resolución de problemas

Que una parte del equipo esté trabajando desde casa mientras la otra lo está haciendo desde la oficina no evitará que sigan surgiendo problemas. De hecho, lo más normal es que sigan produciéndose contratiempos y desencuentros. En cualquier caso, no importa dónde y a qué nivel sucedan: en el modelo de trabajo híbrido hay que seguir dando solución (cuanto antes y más efectiva mejor) a los conflictos para evitar que terminen enquistándose y dañando al equipo.

5. Apoyo constante y real a las personas

La salud física y mental han cobrado especial relevancia en los últimos dos años. Las empresas son más conscientes que nunca de lo importante que es preservar y fomentar el bienestar de sus empleados. Un modelo de trabajo híbrido también es exitoso porque cuida a su gente. Es preciso brindar todo el apoyo a nuestros equipos y ofrecérselo a través de mensajes y acciones prácticas (una conferencia, una sesión de relajación, un curso para aprender a gestionar las emociones en el trabajo…) que nutran su espíritu. De otro modo, nuestro plan para crear un modelo híbrido de trabajo en nuestra empresa cojeará.

¿Necesitas encontrar talento? Publica ahora tu oferta en InfoJobs

PUBLICAR OFERTA