Destacados
Qué son y por qué son importantes los candidatos pasivos
¿Has oído hablar de ellos? Descubre su importancia en tu estrategia de RRHH
En una estrategia de recursos humanos, es importante tener en cuenta tanto a los candidatos pasivos como a los activos. Los activos son los que más conocemos: aquellos que están activamente en la búsqueda de empleo y que seguramente llegarán a ti a través de una convocatoria o incluso sin necesidad de que exista una. Este grupo se compone principalmente de personas desempleadas o descontentas con sus cargos actuales que buscan algo más.
Sin embargo, los candidatos pasivos son aquellos que ni buscan trabajo, ni están necesariamente descontentos en el lugar en el que están. Son aquellos que dedican poco tiempo a rastrear empleos nuevos pero que, ante una buena oferta, podrían plantearse cambiarse de empresa.
Pero, entonces, ¿por qué es bueno dedicar tiempo y esfuerzo a captar a estos candidatos, que no solo tienen ya un trabajo, sino que además están bien donde están? Porque, a pesar de que pueden ser más difíciles de captar, su repercusión en tu oficina será muy positiva. Según un reciente estudio de LinkedIn, los candidatos pasivos tienen 3 grandes ventajas que los hacen destacar:
1. Quieren crear un impacto
Estos candidatos están llegando a un nuevo lugar así que, seguramente, tienen una metodología, filosofía o manera específica para hacer las cosas que llevaba a cabo en su empresa anterior. Por lo tanto, lo más probable es que quieran implementar algo de ella en la tuya. Lo más importante de esto es que recuerdes que, mientras sea positivo, puede ser muy valioso para ti y tu empresa, porque demostrará proactividad, innovación y será una novedad que motivará a tu equipo.
2. No tiene miedo a los retos
Un candidato pasivo que acepte tu oferta es una persona que está dispuesta a asumir y afrontar retos. Es alguien que no le tiene miedo al cambio y que contagiará este espíritu resiliente y trabajador en tu empresa. Además, será un eje clave a la hora de ampliar el espectro de negocio, asumir nuevos clientes o incluso darle un nuevo rumbo a tu empresa.
3. No necesitan tanta capacitación
Si les estás reclutando, es por algo: seguramente tienen ya un puesto en el que desempeñan labores similares o demuestran estar capacitados. Por eso, tienen un valor adicional que es que no les tienes que formar para un puesto, porque ese know how, seguramente ya lo tienen.
¿Tienes algún puesto en tu empresa que necesite a alguien que te aporte estas ventajas de un candidato pasivo? Aunque sean difíciles de encontrar, anímate a definir el perfil ideal que querrías para ese puesto, redacta una oferta que sea muy atractiva y publícala con nosotros. Te aseguramos una cosa, ¡juntos será más fácil encontrar al candidato perfecto!