Ambiente de trabajo
¿Qué puedes hacer en RRHH si te toca trabajar en agosto?
Trabajar durante este mes puede ser una una enorme oportunidad para hacer todo aquello para lo que nunca tienes tiempo
Trabajar en agosto puede ser como hacer una travesía en el desierto. O todo lo contrario. Hay muchas personas que no quieren marcharse a descansar en el mes vacacional por excelencia y sus empresas se lo permiten. Lo más habitual, sin embargo, es que las organizaciones trabajen a medio gas o bajen la persiana.
Sea como sea, aquellos empleados/as que se quedan tienen que cumplir con su horario laboral y desempeñar aquellas tareas pendientes, especialmente si tienen que hacerse cargo de aquellas que sus compañeros/as no pueden llevar a cabo porque están de vacaciones.
Pero es evidente que queda mucho tiempo por delante y que hay interesantes oportunidades para aprovechar el tiempo y ser productivos/as. También en agosto y también en RR.HH. Hoy queremos proponerte una serie de tareas e iniciativas que puedes llevar a cabo si te toca trabajar en agosto. ¡Verás cómo te cunde el tiempo!
1. Practica workation o sal a trabajar al aire libre en agosto
Ahora que el tiempo es cálido y apetece más salir al aire libre, ¿por qué no te animas a practicar el workation? Si tu empresa te lo permite, del mismo modo que has teletrabajado de tu casa, también puedes hacerlo desde tu lugar de vacaciones. Es una buena manera de disfrutar de estos días más apacibles, sin dejar de cumplir con tus obligaciones laborales.
Si esto no es posible, quizá sí puedas bajar a la cafetería de la esquina y conectarte con tu portátil o acudir a cualquier otro sitio desde el que puedas trabajar, pero desde otra perspectiva y, por supuesto, con un ritmo mucho más relajado.
2. Termina aquellas tareas que siempre están pendientes
Está claro que en agosto las cargas de trabajo no son las mismas que en septiembre. Por tanto, también puedes aprovechar estos días para dejar listas todas aquellas tareas que siempre tienes en la bandeja de pendientes. Nos referimos, por ejemplo, a rematar aquellos informes que tanto cuesta que salgan, a responder correos electrónicos o a desarrollar aquellas iniciativas que pueden mejorar vuestro funcionamiento en el trabajo, pero que por tiempo nunca tienes opción de terminar. Tu equipo, a su vuelta, lo agradecerá.
3. Prepara los procesos de selección en standby
Suelen quedar colgados en verano, especialmente si se han puesto en marcha justo antes de las vacaciones. Si tu empresa necesita cubrir ciertas vacantes con urgencia, lo más lógico es que dediques estos días de menos trabajo a preparar los procesos de selección. Puedes dedicarte a leer, filtrar y seleccionar los CV y establecer una hoja de ruta para empezar en septiembre con buen ritmo. Deja para agosto aquello que habitualmente os resulte más engorroso para pasar, cuanto antes, a las incorporaciones.
4. Apuesta por la formación si te toca trabajar en agosto
La formación es nuestra gran aliada para todas las personas que están en el mundo laboral, independientemente del sector en el que se encuentren. Hay infinidad de cursos subvencionados que se pueden cursar online (transformación digital, redes sociales, idiomas, gestión, emociones…) durante los meses de verano.
Si tu empresa suele ofrecer formación a los empleados/as, tú tampoco debes perder el tren. Aunque no solo estamos hablando de formaciones, sino de conferencias, seminarios o lecturas estupendas para seguir aprendiendo mientras todo el mundo está de vacaciones.
5. Piensa en nuevos proyectos y mejoras para el nuevo curso
En menos de lo que te imaginas, septiembre habrá llegado y tocará ponerse de nuevo manos a la obra con toda la intensidad o incluso más. Por eso agosto es un buen momento para desarrollar proyectos y mejoras que puedan incidir en el buen funcionamiento de la empresa, en el bienestar y la salud de las personas que trabajan en ella.
Piensa y redacta tus iniciativas para que, a la vuelta de tus responsables, puedas proponerlas. Todo el mundo verá lo mucho que has aprovechado el tiempo y tú te sentirás, sin duda, mucho más realizado/a y feliz. ¡Ánimo con ello!